martes, 24 de septiembre de 2013

Fabada asturiana



Ahora que viene el fresquito ya apetece un menú algo más calorífico o consistente.
La fabada es muy fácil de preparar. Tan solo consiste en tener unas alubias adecuadas, y sobre todo y muy importante, la morcilla y el lacón (también sirve un trozo de tocino).
La foto que acompaña muestra las judías ideales, que gracias a mí cuñada Inés y a mi hermano Santiago, nunca me faltan. Regina, no te vayas a enojar, pues las últimas me las has traído tú.
La pringá, o  (compango), que así se llama, lo compro en (MERCADONA) que está muy bueno.
Las judías o alubias, se ponen a remojo o en agua el día anterior. Mi secreto aquí es ponerles un pellizco de bicarbonato, pero solamente cuando las pongo en agua, nunca para ponerlas al fuego.  Se ponen a cocer cubiertas de agua fría, se agrega el compango. Yo lo hiervo un poquito para quitarle la grasa. Hay que ir agregándoles agua, según van necesitando. Personalmente en la olla exprés también salen riquísimas. En la olla exprés tardan sobre 45 minutos. La cocción debe ser lenta. Se les pone la sal cuando ya estén cocidas y un poquito de colorante.
Buen apetito.




A esta fabada le iría mejor un culín o dos de sidra.
Sería lo ideal y de postre un cuenco de arroz con leche. Esto lo haré para lapróxima.